Como futura docente este tipo de educación me parece de lo más apropiado, pues empezamos a dejar un poco atrás la forma de enseñar tradicional, los niños con papel, libros y bolígrafos, atendiendo al profesorado, y nos vamos acercando a un proyecto más tecnológico y, em general, a nuestra realidad. Hoy en día vivimos en un mundo digitalizado y la educación se debe adaptar a esta nueva realidad. El colegio Victor Hugo es un claro ejemplo de ello, han incorporado pizarras digitales, mesas en las que el alumnado puede escribir sobre ellas…y sobre todo las clases con temáticas, que permiten que los alumnos salgan de las aulas tradicionales y vayan a otras diferentes, haciendo las clases incluso más atractivas. Mi opinión sobre este proyecto es que se debería realizar en más países e invertir en ello, pues los niños trabajan de una manera más colectiva e innovadora, que es a fin de cuentas lo que se pretende con los pequeños cambios que se van realizando.
