Grupo 1: David Climent Such, Laura Gallardo Pérez, Salvador Galvañ Linares y Dabria Valero Pérez.
Caso 1: un chatbot como “profe auxiliar”
En un colegio, un docente decide usar un chatbot con IA para responder preguntas básicas sobre matemáticas y ortografía en el aula. Algunos estudiantes empiezan a depender demasiado del chatbot en lugar de pensar por sí mismos.
¿Qué riesgos y beneficios tiene el uso de esta tecnología en el aula?
Por un lado, como riesgos encontramos que mediante un chatbot no se realiza un aprendizaje significativo sobre los conceptos matemáticos y ortográficos, ya que en lugar de elaborar el significado por uno mismo con la guía del maestro, se hace dependiendo de una IA que te da la respuesta directamente.
Otro inconveniente sería que, al depender de este chatbot, no invierten tiempo en pensar una respuesta por sí mismos, por lo que los conocimientos podrían no llegar a consolidarse, ya que, aunque no entiendan el contenido de la tarea, la resolverían con IA. Además, no estarían desarrollando el pensamiento crítico ni la capacidad de resolución de problemas, ya que se acostumbrarían a recibir una respuesta inmediata externa.
Por otro lado, encontramos beneficios como la rapidez e inmediatez de las respuestas del chatbot, además de ser útil para dar ideas generales a modo de inspiración mediante un esquema previo o incluso revisión de ideas propias. También es una herramienta que ahorra tiempo de trabajo, lo cual puede ser muy útil una vez adquiridos y consolidados los conocimientos para practicar.
¿Cómo se puede equilibrar el uso de la IA sin afectar el pensamiento crítico de los niños?
Consideramos que se puede equilibrar el uso de la IA de modo que suponga un complemento a modo de lluvia de ideas o inspiración, y no se dependa de ella para buscar información o realizar cualquier tarea.
También, puede enseñarles el docente cómo funciona la IA, explicándoles tanto sus ventajas, como sus limitaciones y cómo usarlas de manera eficaz y segura; o incluso utilizarla como herramienta para corregir y dar feedback en las tareas que el alumnado se lleve a casa, ya que podrían resolver sus dudas cuando el maestro no esté presente.
